04 de enero del 2010

Después de un tranquilo y completo desayuno cogemos el metro para acercarnos hasta la Cathedrale de Notre Dame. Este edificio del gótico es el corazón simbólico y geográfico de París (las distancias a todos los puntos de Francia se calculan desde éste lugar) y como no podía ser de otra manera está atestado de turistas.
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Tras echarle un rápido vistazo a la majestuosa catedral cruzamos el Senna y nos adentramos en el barrio latino.
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Nos encanta, sobre todo la Rue Jacob, que se compone de pequeñas galerías de arte (pintura, escultura, fotografía, decoración….)

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“En la librería Taschen (http://www.taschen.com/) nos damos un capricho cada uno, yo concretamente compro un volumen de fotografía de Terry Richardson, Jokin dos biografías fotográficas (Mae West y Steve Mcqueen) y Lur un tomo de arquitectura y decoración”

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Atravesamos el enorme Musèe du Louvre, comemos en un fast food y después de una sentadita en un Starbucks volvemos al centro de la capital.

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Subimos a la terraza panorámica del edificio Galerias Lafayette donde el lujo de disfrutar de semejantes vistas es gratis.

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Para resguardarnos de las bajas temperaturas decidimos visitar el Cemtre Pompidou, un gran museo de arte moderno que nos ocupa la atención durante largas horas.

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Quedamos en el barrio para cenar con Olatz, que nos sugiere un restaurante de comida francesa donde nos han atendido amablemente y nos han servido un menú de montaña para combatir el frío (patatas cocidas con salsa carbonara acompañada con una ensalada de lechuga) buenísimo.

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Volvemos a casa poco antes de las 12.00h. Hace frío, unos 0º…

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