.

.jpg)
...y desde Londres volamos a París. El aeropuerto francés es el más elegante que he conocido nunca.
.
.
.

.
A penas duermo en todo el vuelo desde París a Tokyo. Amenizo el vuelo sobre todo leyendo "La reina en el palacio de las corrientes de aire", jugando al Shangay, al Quien quiere ser millonario, y viendo la pelicula de Hanna Montana (me quería morir...!!)
.
.
Aterrizamos en Tokyo. Cansados, emocionados y con ganas de instalarnos de una vez por fín.
Comemos Shushi en un pequeño restaurante del barrio y encontramos el hotel sin problemas.
Mola.
.
.
.
Después de una siesta, salimos a dejarnos perder por las calles de Shinjuku, nuestro barrio. Cenamos en un restaurante, Cocolo-café, donde pedimos unas albondigas con un rebozado de especias acompañadas con arroz, y unas tiras de carne con verduras que no molaban mucho pero que tampoco se han quedado en el plato.
.
.
.
.
.
.
.





Nuestro barrio parece ser un distrito donde mucha gente sale de marcha, así que decidimos tomarnos unas coronas ya que hace buena noche y tomar un primer contacto con su gente. En apariencia son muy simpáticos, cuidan su imagen y beben sin fín (vimos varios japos vomitones) y en los garitos escuchan música de videojuegos. Hay garitos donde pinchan música disco occidental, quizá para atrapar más público, pero a nosotros desde luego no nos ha gustado mucho el ambiente nocturno que se respiraba.
.
1 comentario:
qué interesante maitia... me gustan mucho las fotos!! muy bueno el cruce de preparados, listos, ya!!! y q envidia de viaje, x favor!!! muy guay el cuaderno de bitácora, muy entretenido!
Muxu candy bat!
Publicar un comentario